ACEITE DE ROMERO
A mí me funciona... al resto, no lo sé.
Por Margo
Hace cosa de un mes mi peluquera me dijo muy sorprendida: "¿Te has dado cuenta de la cantidad de pelos nuevos que tienes?". Entonces, conecté puntos.
Para poneros un poco en contexto, llevo decolorándome el pelo con mechas babylights más de una década y aún con eso, tiene buen aguante. A pesar del castigo que le he estado dando a mi cabello – encima, es fino – gozo de unas puntas sanas y una melena que, aunque no pueda presumir de ser la más abundante del mundo, sí es saludable y con mucho brillo.
Evidentemente, todo suma: ponerme en manos de auténticas profesionales, seguido de una correcta rutina de cuidado en casa utilizando productos de buena calidad.
De raíz a puntas
Tengo una pequeña obsesión que roza lo insano con el cuidado capilar. Siempre he sido de invertir y no “escatimar” – bueno, muchas veces he hecho muecas viendo algunos precios - en buenos productos de lavado y mantenimiento.
De hecho, os compartí un artículo dedicado exclusivamente a los aceites capilares que os dejo justo aquí abajo:
Retomando la historia inicial de este artículo, conecté los puntos y le confesé a mi estilista: “Lo cierto es que desde hace mes y medio estoy tomando biotina pura* por las mañanas y he incorporado unas gotitas de aceite de romero a mi rutina de lavado. No sé si habrá tenido algo que ver…”. Spoiler: sí.
Si bien, todo influye: beber mucha agua, mantener una dieta equilibrada, rehuir del sedentarismo y el exceso de pantallas, hacer deporte de forma regular, cepillarme bien el pelo y aplicar aceites capilares en las puntas antes de dormir. Y ya está, os acabo de desvelar la lista de ingredientes esenciales para mi fórmula magistral de “mimos para mi pelo”.
*Las pastillas de biotina pura se encuentran de venta libre en farmacias. Como todo complejo vitamínico para el cuidado de uñas y/o cabello se deben consumir durante un breve período de tiempo (dos meses) y espaciar su consumo con un mes o dos de descanso antes de retomar el tratamiento. En cualquier caso, a pesar de que no es un medicamento peligroso o que atente contra la salud del consumidor, prefiero recomendaros una parada obligatoria por la consulta del doctor si es que sufrís de una pérdida abusiva o alarmante del cabello. Tu dermatólogo sabrá, con mayor precisión, encontrar una solución más acorde a tu situación concreta.
Cómo usar el aceite de romero
El aceite esencial de romero necesita de un producto carrier o “portador” (un champú, por ejemplo), ya que depositarlo directamente sobre el cuero cabelludo es perjudicial y contraproducente a nuestros objetivos: melenaza.
De hecho, en las indicaciones de uso que me venían señaladas en el paquete, se explicaba el modo de uso correcto: mezclar unas 4-5 gotitas en tu champú habitual o acondicionador.
También es posible mezclarlo junto a otros aceites - como el de jojoba, por ejemplo -, dejarlo actuar sobre el cuero cabelludo por unos 15 minutos y luego lavarlo como de costumbre. Importante: evita irte a dormir con el aceite puesto, ya que atrae la suciedad.
Un aceite viral #foryou
Decidí darle una oportunidad al aceite de romero porque lo vi pululando por mi “For You Page” de Tik Tok (gracias algoritmo por alimentar mis ansias de consumo).
Si bien antes también consulté varios vídeos de dermatólog@s y especialistas que explicaban el correcto uso y aplicación de este tipo de aceite.